Muchas veces buscamos a Dios por un milagro, tal vez Él nos escucha y nos concede toda petición, algunas personas son agradecidas y continúan caminando de su mano; y otros, olvidan que Dios si existe.
Lastimosamente, hay casos dónde ocurre todo lo contrario a lo que pedimos, y es cuando nos cuestionamos ¿Y por qué Dios lo permitió? ¿Acaso no me escucha o Él no existe?
Quiero compartirles mi testimonio, en pocas palabras solamente puedo decir que Dios es de propósitos, todos vivimos diferentes procesos, pero cuando le entregamos nuestra vida a Él, entendemos que todo obra para bien, incluso en las aflicciones.
Por: Cindy Stefania Osorio Higuita.